Por: Laura Martínez Ríos, Executive Director, Pro Esteros

Muchos de nosotros hemos escuchado que los humedales se encuentran entre los ecosistemas más valiosos económicamente y más biodiversos del mundo, pero seguramente también escuchamos que están desapareciendo tres veces más rápido que los bosques, lo que representa graves consecuencias para nuestro futuro, a menos que tomemos medidas urgentes para garantizar su supervivencia.

Los humedales representan diferentes cosas para las personas, en algunas ocasiones representan alimento, en otras suministros o materiales, a veces funcionan como protección contra la erosión en las costas o contra tormentas.

Muchos de nosotros disfrutamos los maravillosos paisajes que nos regalan, el turismo los busca y disfruta a lo largo de casi todo el año y del país. Para algunas comunidades su valor va mucho más allá de los recursos materiales porque está ligado a su cultura y hay quienes tiene sus lugares sagrados en algún humedal, pero sin importar todo lo que nos beneficiamos de los humedales, tal vez el mayor de los tesoros que recibimos de ellos y del que nadie puede negar su importancia es el agua.

El agua es el pilar del desarrollo social y económico de cualquier cultura y los humedales almacenan y purifican agua dulce, dan hogar a por lo menos el 40% de las especies del planeta, ya sea que vivan en ellos o ahí se reproduzcan[1], pero todo esto lo podemos perder.

De acuerdo al documento “Perspectiva Mundial de los Humedales 2018”, elaborado por la Convención Ramsar[2], aproximadamente el 35 por ciento de los humedales del mundo se perdieron entre 1970 y 2015, y a partir del año 2000, estas pérdidas han aumentado.[3]

Este año 2021, la Convención relativa a los humedales de importancia internacional, conocida como Convención RAMSAR, celebra 50 años de esfuerzos por conservar estos imprescindibles e invaluables ecosistemas. Desde su inicio en 1971, países de todo el mundo, se han adherido a este tratado, por lo cual hasta este año lo han firmado 170 países y hay 2,413 humedales designados de importancia internacional, lo que significa que unas 254,534,395 ha alrededor del mundo, han sido reconocidos como humedales de importancia internacional, por sus propios países.

Esto nos habla de la importancia de estos ecosistemas, del reconocimiento que vamos haciendo de lo mucho que nos benefician, sin embargo, los seguimos perdiendo.

México, firmó este convenio el 4 de julio de 1986, y desde su firma a la fecha, ya son 142 los humedales que México ha pedido que sean incluidos en la Lista de humedales de Importancia Internacional, lo que no es una tarea menor, ya que hablamos de una gran gama de humedales: marinos, continentales y artificiales, aunque siendo México un país con más de 11,000 km de costas, la mayoría son humedales marinos.

Para dar cumplimiento a este tratado, nuestro país designó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) como la Autoridad Administrativa, lo que significa que esta dependencia es la responsable de que México cumpla con el compromiso que implica la firma de este tratado internacional. A su vez, SEMARNAT designó a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), como el Punto Focal, es decir como el Coordinador Nacional, dentro de su estructura, y esto tiene mucho sentido porque del total de Sitios Ramsar, 80 están relacionados territorialmente con diversas Áreas Naturales Protegidas (ANP).

Y este tipo de humedales, los costeros, hace muy complejo su cuidado y manejo porque en particular en nuestro país, la cantidad de autoridades que tienen atribuciones en la zona costa puede, en algunos casos ser hasta más de 30, entre dependencias federales, estatales y municipales, y como es de imaginarse, existe una muy alta complejidad legal, por lo que las leyes, normas y atribuciones  relacionadas con la conservación y uso racional de los humedales, están pulverizadas en la legislación nacional y las instituciones competentes.

Por eso es importante tener en cuenta los compromisos que México asumió, al igual que cada país, cuando pasa a ser parte de la Convención Ramsar, que los podemos resumir en 3 pilares concretos:

  • Designar humedales idóneos para la “Lista de Ramsar” y garantizar su manejo eficaz
  • Trabajar mediante planes, políticas, legislación nacional, medidas de gestión y educación del público para hacer un uso racional de estos humedales y
  • Cooperar en materia de humedales, especialmente aquellos transfronterizos y especies compartidas, a nivel nacional e internacional.

En muchos países industrializados, incluyendo México, entre las presiones y amenazas más recurrentes que enfrentan los humedales podemos mencionar: el cambio de uso de suelo debido al desarrollo urbano mal planeado, expansión de las actividades productivas, introducción de especies exóticas e invasoras, aprovechamiento ilegal y sobreexplotación de la biodiversidad, descargas de contaminantes a los cuerpos de agua, por diversos sectores, el cambio climático, etc., y en muchos casos estas amenazas se agudizan por la falta de aplicación de la legislación o como ya se mencionó, porque son muchas las dependencias que tienen injerencia en la zona.

Como se puede apreciar, no es tarea fácil proteger, conservar y lograr un uso racional de los humedales del país, sin embargo, eso no es motivo para no trabajar en ello. Así que, como en varios sectores, en este tema también hay un papel muy importante que la sociedad juega, junto con las autoridades, porque no debemos olvidar que los humedales nos benefician a todos, por lo que su buen manejo y conservación, también nos corresponde a todos.

Para ir marcando las directrices en el cuidado de los humedales, la Convención Ramsar, cada tres años tiene una reunión con todos los países que la conforman, la COP, en donde se presentan los informes de cada país sobre sus humedales, también se toman resoluciones que todos los miembros deben acatar, y para que este trabajo pase del nivel internacional al nivel nacional, y las resoluciones sean conocidas y aplicadas entre las diferentes instancias y sectores, en México existen una serie de instancias o foros, en los que las autoridades se apoyan y aun cuando el esquema parece complejo, por los muchos los actores, los podemos resumir en los siguientes grupos:

  • Las instituciones de gobierno a través de las secretarías de estado y los órganos descentrados,
  • El Comité Nacional de Humedales como un órgano de gobernanza nacional,
  • Los Comités estatales, consejos de cuenca y los demás grupos locales,
  • También están las autoridades encargadas del manejo de los Sitios Ramsar, que son desde los gobiernos estatales y municipales, incluyendo a las organizaciones de la sociedad civil, las instituciones académicas y en algunos casos, comunidades, ejidos y comunidades indígenas y finalmente, pero no menos importantes
  • Los usuarios de los Sitios.

No podemos negar que en las últimas décadas la sociedad civil va teniendo cada vez mayor oportunidad de participar, de manera más puntual en temas de interés nacional, y ese es el caso respecto a los humedales. Desde el 2004, el Comité Nacional de Humedales (CNH) es un órgano consultivo conformado bajo acuerdo del Consejo Nacional de Áreas Naturales Protegidas, que permite, entre otras cosas, asesorar y brindar apoyo a la Autoridad Administrativa en México, en asuntos relacionados con la Convención y su correcta aplicación[4]

Su principal objetivo es el de ser una instancia de consulta, apoyo y asesoría, y busca:

  • Facilitar la comunicación ente las personas interesadas,
  • Incentivar la participación informada y en tiempo oportuno de las comunidades locales, en la conservación y uso racional,
  • impulsar la valoración económica de los humedales como un instrumento eficaz de facilitación en la toma de decisiones políticas,
  • Coordinar las contribuciones de expertos a los informes nacionales y apoyar en la evaluación de las solicitudes de información dirigidas al país,
  • Brindar apoyo a la autoridad administrativa para la revisión de solicitudes de nuevas designaciones, así como la evaluación de los sitios Ramsar existentes, promover iniciativas de cooperación a nivel local, nacional e internacional relacionados con la conservación de los humedales.

En sus diferentes etapas, su conformación no ha cambiado mucho, por lo tanto, el Comité busca incluir a las instituciones gubernamentales que, bajo sus atribuciones, contribuyan a la conservación de los Sitios Ramsar, por lo que aproximadamente el 63% de sus miembros pertenecen a este sector, un 12% corresponde a instituciones académicas y un 25% a organizaciones de la sociedad civil. Pero es importante recalcar que en este comité la presidencia generalmente recae en algún miembro del sector académico o de la sociedad civil, y a CONANP le corresponde el papel de Secretario Técnico del Comité.

Y es así que el Comité Nacional es uno de los espacios en donde la sociedad y gobierno debemos trabajar en beneficio de los humedales, pero no es el único, porque los que día a día trabajamos, estudiamos, protegemos cualquier humedal del país, estamos beneficiando no solo a la flora y la fauna, estamos beneficiando principalmente a todas las personas que depende de estos importantes sitios, y hoy que la Convención cumple 50 años trabajando en favor de los ecosistemas, nos hace algunas recomendaciones que todos podemos seguir, para tener agua suficiente para nosotros y para la naturaleza.

Podemos dejar de destruir los humedales y empezar a restaurarlos, y una buena forma de hacerlos es no represar los ríos ni extraer agua en exceso de los acuíferos, trabajar para resolver el tema de la contaminación, limpiando las fuentes de agua dulce, siendo más eficientes en el del uso del agua y los humedales con prudencia y finalmente, trabajar con nuestras autoridades para logar que se integre el cuidado del agua y de los humedales, en los planes de desarrollo y la gestión de los recursos, a todos los niveles, porque recordemos que agua es vida.

[1] www.worldwetlandsday.org

[2] La Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas

[3] Convención de Ramsar sobre los Humedales. (2018). Perspectiva mundial sobre los humedales: Estado de los humedales del mundo y sus servicios a las personas. Gland (Suiza). Secretaría de la Convención de Ramsar.

[4] SEMARNAT. (2017) Manual Operativo del Comité Nacional de Humedales. 1ª Ed. México. CONANP.